El proyecto “Los Guardianes del Mar” tiene como objetivo que el PERÚ SEA EL PAÍS MÁS LIMPIO DE LA REGIÓN en el 2030, por lo tanto líder en protección del mar en cumplimiento de los compromisos firmados recientemente en la conferencia OCEÁNOS de la ONU que hace un llamamiento a todos los países para conservar y usar de forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos. La crisis ecológica, junto con la destrucción de buena parte de la biodiversidad puede poner en peligro la existencia misma de la especie humana. Cualquier daño al ambiente es un daño a la humanidad.
“LOS GUARDIANES del MAR” está apoyado por artistas plásticos que intervienen a surfistas, pescadores y chefs y los convierten en GUARDIANES.
El artista JOSÉ TOLA intervino a la surfista BRISA MÁLAGA y la convirtió en MASCARÓN DE PROA para decir que los antiguos botes de madera surcaban mares limpios.
GINO CECCARELLI intervino al pescador GATO VÁSQUEZ y lo convirtió en CARDUMEN, homenaje a la organización plástica y democrática de los peces.
NANI CÁRDENAS colaboró con su obra para convertir a MICHA TSUMURA en ALGA, para señalar que el lugar de las algas hay que protegerlo y defenderlo, de los que lo agreden lo mutilan y cosechan contra la ley y contra la vida, como el espacio de la biodiversidad.
Y con la colaboración de la obra de la artista plástica CRISTINA PLANAS, un bello gallinazo bebé, AMALAMAR realizó la producción GALLINAZO transformando en el ave al surfista JONATHAN GUBBINS, para señalar que tenemos que producir menos basura, que tenemos que reciclar y dejar de echar desechos al mar.
La producción del GALLINAZO fue efectuada delante de la Planta de La Chira, la que finalmente alejó de la costa las heces que se echaron directamente al mar hasta setiembre del año pasado, pero que el Municipio de Chorrillos utiliza ilegalmente como su “patio de maniobras de basura”. La municipalidad echa la basura del distrito en la avenida Costanera, que allí todavía se mantiene como un lugar apartado y oculto –casi secreto–. Es tan camuflado ese emplazamiento que ni siquiera los habitantes de “Pacífico de Villa” lo utilizan como ingreso a su barrio. Y no lo utilizan porque el municipio lo ha convertido en un muladar.